Estimados amigos Historiadores y Genealogistas.
Envìo a Uds. el registro del bautismo de Juan Mata Ortiz, originario del pueblo de Galeana, Chih., naciò el año de 1835, llegó a ostentar el grado de Mayor y estuvo al lado del Presidente don Benito Juàrez, cuando este personaje luchò por salvar el honor de la Repùblica; combatió contra los temibles apaches y uno de ellos lo matò, su nombre el jefe JU.
Fuentes. del reg. Family Search. Iglesia de Jesucristo de los Santos de los últimos Dìas.
Libro de Bautismos de la Iglesia de la Inmaculada Concepciòn, Galeana, Chih.
Margen izq. En 8 de dicho a Juan Mata.
"En esta Parroquia castrense de S. Buenaventura, a los ocho días del mes de Febrero de 1835: Yò el R.P. Capellan Fr. Rafael Echeverrìa, bautizè solemnemente puse los santos oleos y sagrado crisma a Juan Mata de ocho días de nacido, hijo legitimo de D… Ortiz y de Da. Joaquina Padilla, fueron padrinos D. Ramòn Ortiz y Da. Concepciòn Varela, a quienes adverti el parentesco espiritual y obligación que habían contraído. Y para constancia lo firmè. Fr. Rafael Echeverrìa".
"Muy hombre era Mata Ortiz, para que hubiera hecho mella en èl aquel grito desgarrador, que era como formal promesa, o como clara sentencia de muerte, que un dìa le lanzò "Ju", el temible Jefe Apache sucesor de Victorio. "Me las pagaràs, traidor, para tì no balas, ni cuchillo, ni mecate… para ti lumbre, en cuanto caigas en mis manos".
Muy hombre era Mata Ortiz, tanto que cuentan que este valientìsimo soldado, en alguna ocasión en que sintió que su gente empezaba a flaquear cuando sostenía algún agarre con la Apacherìa, enfureció, lanzò un grito que le salió del fondo del alma … o mas adentro: "si alguno de los presentes por equivocación, se pusieron las enaguas de sus mujeres, vayan al pueblo a cambiárselas; los veintiùn Chihuahuenses que oyeron aquella recriminatoria, contestaron con indignación con un decir que indicaba su valor, del que dieron prueba al morir en su compañía".
Ju, trataba de cazarlo continuamente, varias veces le tendió trampas infructuosas, pero llegó un dìa.. por el valle solitario, rodaban bolas de fuego, las palabras malditas " Para ti no balas, ni cuchillo, ni mecate, para ti hombre traidor, lumbre". Treinta y dos vidas fueron inmoladas en aquel encuentro fatal, entre las fuerzas de Mata Ortiz y las de sus enemigos los temibles Apaches; solo quedaron para contarlo, dos hombres, uno herido y otro que había salido velozmente a pedir auxilio a los pueblos mas cercanos.
La venganza del Jefe Apache Ju, en aquel hombre, muy hombre que fuè Mata Ortiz, quien sufrió el tormento de las llamas, lanzando gritos tan desgarradores, que hasta las montañas parecían estremecerse. Su cuerpo desfigurado, fuè sepultado en el atrio del templo católico de Galeana, Chih. Las últimas palabras de Mata Ortiz o el Capitàn Gordo como lo habían bautizado los Apaches, cuando viò llegar la muerte, fueron estas, "Ju en nombre del todopoderoso, te perdono los daños que a mi Patria hiciste".
Anexo fotografía y estatua del Indio Victorio, Jefe de los Apaches Chiricahuas.
Victorio, fuè un niño secuestrado a la edad de seis años por los apaches en la Hacienda de Encinillas, Chih. era hijo de Marìa Cedillo y se llamò Pedro Cedillo.
"La sierra de Chihuahua, soberbia, imponente, fuè testigo. Fuerzas del Corl. Don Joaquìn Terrazas, dividida en 2 columnas: una bajo su mando y otra al de Juan Mata Ortiz; atardecer del dìa 14 de Octubre de 1880 en Tres Castillos. El feroz Victorio, valiente hasta lo increíble, verdugo del cristiano, indomable Jefe de la Apacherìa, està frente a frente de Mauricio Corredor, el noble Tarahumara, Capitàn de los voluntarios de Arisiachi; sus miradas se encuentran en actitud de reto, se acordarìa Victorio de la Candelaria, donde sus víctimas le provocaron carcajadas sarcásticas y diabólicas al verlas retorciéndose de dolor, pues era su costumbre contemplar satisfecho esas agonías, ya que se regocijaba hasta el éxtasis, viendo sufrir hasta que expiraban sus enemigos".
Ambos casì a un tiempo, levantaron sus armas y dispararon el fuego que arrojaba las balas que decidieron entre la razón y la violencia, el Jefe Apache cayò de su caballo con el pecho destrozado, murieron en la lucha 62 guerreros apaches y se tomaron prisioneros 68 entre mujeres y niños.
Fuentes del relato. El Principio del Fìn. La Apacherìa en Mèxico. Por Alfonso Escarcega. Centro Librero la Prensa, Chihuahua, Chih.
Tte. Corl. Intdte. Ret. Ricardo R. Palmerìn Cordero.
M.H. Sociedad Genealògica y de Historia Familiar de Mèxico y de la Sociedad de Genelogìa de Nuevo Leòn.
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